Otro reto al que se enfrentan los pizzeros caseros es la intolerancia a la lactosa. Como se utiliza tanto queso en las pizzas, la lactosa representa un verdadero problema para mucha gente: ¡el 75% de la población mundial es intolerante! (Gaubert, 2017) Para nosotros es impensable servir una pizza sin queso, por lo que ofrecemos mozzarellas naturalmente sin lactosa. Durante el proceso de fermentación de la leche de vaca, la lactosa es digerida por una enzima llamada "lactasa". Maestrella también ofrece una amplia selección de formas de mozzarella (rallada, en dados), así como de contenido graso (40%, 45% o 47%), ¡para que siempre tenga queso mozzarella fundente cubriendo su pizza!
Además de la masa de la pizza, los ingredientes también están evolucionando. Se calcula que entre el 6 y el 10% de la población europea es vegetariana o vegana (European Data Journalism Network, 2019). Por eso, las pizzas vegetarianas o veganas están apareciendo en las cartas de los restaurantes y se han vuelto tan comunes como la Margherita.
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